No sé con qué pie levantarme.
Si uso el izquierdo me quema tu fuego;
si uso el derecho me hiela tu aliento.
¿Tan difícil es caminar...?
Mis átomos persiguen tu eco
y tú ignoras el "logos" de mi palpitar.
El calambre nos ha abierto un hueco
en el que tú instalaste tu inseguridad.
La dejaste ahí descuidada...
...y miraste a otro lugar...
El amor no es infinito,
pues definido es nuestro respirar;
pero el concepto vive eterno
y no nacimos para ladrar.
No hagas del cosquilleo un infierno...
...y acaricia el verbo: confiar.